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El entrenador personal personaliza el ejercicio físico para los pacientes con enfermedades neuromusculares con terapia física.
Hoy, 15 de noviembre, se celebra el Día Nacional de las Enfermedades Neuromusculares. Una correcta terapia física controlada por un entrenador personal puede ayudar a mantener la fuerza muscular y prevenir contracturas y deformidades.
¿Qué son las enfermedades neuromusculares?
Las enfermedades neuromusculares son enfermedades neurológicas y de naturaleza progresiva. La mayoría de ellas tienen un origen genético y comparten la pérdida de fuerza muscular en los pacientes que las sufren.
Este tipo de enfermedades generan discapacidad, con la consecuente pérdida de la autonomía personal y las consecuencias que ello conlleva. A día de hoy no existen todavía tratamientos efectivos, ni curación. Puede manifestarse en cualquier etapa vital, aunque los datos demuestran que más del 50% aparecen en la infancia. En toda España existen más de 60.000 afectados por enfermedades neuromusculares.
Este tipo de enfermedades repercuten en los nervios que controlan los músculos voluntarios. Estos músculos son aquellos que se pueden controlar, como las piernas o los brazos. Para que estos músculos entren en funcionamiento, las neuronas deben enviar mensajes para controlar esos músculos. Si estas neuronas se enferman o se mueren, la comunicación existente entre el sistema nervioso y los músculos se rompe. La consecuencia es un debilitamiento importante del músculo. Así pues, pueden generarse espasmos musculares, dolores y problemas articulares y del movimiento. En algunos casos puede afectar incluso a la función cardíaca y la capacidad para respirar.
Entre este tipo de enfermedades, las más comunes son la esclerosis lateral amiotrófica, la esclerosis múltiple, la distrofia muscular y la atrofia muscular espinal.
Todas ellas provocan una pérdida de fuerza muscular en el paciente. Es por ello que una terapia física personalizada bajo la supervisión de un entrenador personal y el médico correspondiente puede ayudar a aliviar los síntomas de este tipo de enfermedad.
Aspectos relacionados con el ejercicio físico
A la hora de contratar un entrenador personal hay que tener en cuenta que éstos son expertos en diseñar programas de ejercicio para cada persona. Además, se encargará de trabajar con el paciente los ejercicios que mejor le ayuden en su terapia física para cada tipo de enfermedad.
Hay que tener en cuenta que tener una enfermedad neuromuscular no tiene que entrar en conflicto con hacer ejercicio físico. Este debe estar aprobado por el médico y controlado adecuadamente por un entrenador personal.
Ejemplo de ello es la terapia física que realizan muchos pacientes con esclerosis múltiple.
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Ejercicios aeróbicos
Los con esclerosis múltiple no muy avanzada realizan, entre otros, ejercicios aeróbicos. Este tipo de ejercicios tendrá unos grandes beneficios, favoreciendo una buena condición física y capacidad funcional. Otras personas con mejor nivel cardiovascular podrán realizar ejercicios aeróbicos 3 o más días a la semana, con una intensidad y duración determinadas.
Otros ejercicios como la natación son actividades muy recomendables para este tipo de pacientes. Los ejercicios realizados en el agua tienen grandes beneficios, ya que se trabajan miembros inferiores y superiores y además ayuda a pacientes con problemas de equilibrio. Para aquellas personas con esclerosis múltiple más avanzada se recomienda la bicicleta, con el fin de mejorar la capacidad motora.
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Fuerza muscular y flexibilidad
En cuanto a fuerza muscular y flexibilidad, el objetivo debe ser mejorar la fuerza de los grupos musculares no afectados. Cuando se trata de pacientes leves, los grandes grupos musculares pueden ejercitarse con varias series de determinadas repeticiones por cada grupo para evitar la fatiga del paciente. Entre los beneficios de este tipo de ejercicio se encuentran un aumento del equilibrio, la coordinación, y la autoestima y confianza del paciente.
En pacientes más graves, se llevarán a cabo ejercicios pasivos para favorecer la desaparición de posibles contracturas.
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Ejercicios de estiramientos
Los ejercicios de estiramientos también serán adecuados para este tipo de pacientes. Una progresión de los ejercicios más suaves que se vayan incrementando hasta conseguir la máxima amplitud. Si se realizan a diario, se pueden evitar contracturas.
En el ejercicio se deben evitar los pesos libres. Se recomiendan maquinas adaptadas, y actividades que mejoren la amplitud del movimiento, como Yoga, Tai-Chi o Pilates.
Además, estos ejercicios controlados por el entrenador personal deben complementarse en casa con unas rutinas de ejercicios sencillos.
A tener en cuenta durante el ejercicio es la capacidad motivadora del entrenador personal con estos pacientes. Debe motivarles para continuar con su terapia física y mejorar así sus condiciones de vida.
Puedes consultar los consejos que expone Birgit Bauer sobre realizar actividad física si se sufre esclerosis múltiple.
Conclusión
Tras la lectura y el análisis realizado, se demuestra que el entrenador personal cumple un papel relevante en la terapia física de los pacientes afectados por alguna de las enfermedades neuronales existentes. El apoyo de un profesional especializado en la actividad física ayudará a estas personas a desarrollar sus ejercicios de manera controlada y correcta.
Si estás interesado en formarte como entrenador personal, puedes consultar nuestro curso de entrenador personal. Si no, también te pueden interesar estudios relacionados como el curso superior de entrenador personal y coaching deportivo, el curso de psicología deportiva o el curso de monitor de natación terapéutica.
